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Estambul, Joseph Kanon

Los avatares del protagonista, León Bauer, en una selva de amenazas, francotiradores, judíos en fuga, malas conciencias…son verdaderamente electrizantes.
El ritmo no decae en ningún momento ni tan siquiera en los “affaires” o en la peculiar relación de León con su esposa.
La trama está marcada por el asesinato de dos americanos y el «cambio de cromos» con criminal de guerra de por medio. La trama está marcada a su vez por los judíos que huyen a Jerusalen a cambio de autenticas fortunas. Y en la trama tampoco falta una hermosa historia de amor, acrecentada por la decencia de nuestro hombre, por su capacidad de entrega y de discernir entre el bien y el mal.
Demasiado «legal» para ser espía, León irá desplegando su capacidad de supervivencia , para finalizar en la opción más ¿lógica?…

La lectura pondrá a prueba la paciencia del lector que página a página se verá envuelto en los encantos de Estambul y de una época que, tan bien retratada en las “pelis” americanas de los 50, no nos es tan extraña.
Es en blanco y negro y es una de espías… de las buenas.

Silas Corey: la red Aquila, Fabien Nury y Pierre Alary

A continuación aterrizamos de golpe en pleno París de la Gran Guerra. Y eso mola mucho. Y conforme vamos pasando páginas nos topamos con una historia a base de intrigas, espionaje de altos vuelos y un objeto que puede cambiar el transcurso de la Historia. Todo ello protagonizado por antihéroes, antiheroínas, antivillanos, antibelicistas, antipacifistas… En fin, todo un sarao. ¿Más visto que el tebeo? Tal vez. Pero funciona.

El tipo de dibujo que presenta no es algo que de entrada me atraiga demasiado. Cabe destacar que el dibujante Pierre Alary participó en la realización de la película de Disney Tarzán, con lo que supongo os haréis una idea de por dónde van los tiros. Pero, maldita sea, hay que reconocer que este tipo tiene sentido del espectáculo, de la acción y un concepto visual muy cinematográfico, sobre todo a la hora de dotar de dramatismo a las situaciones y a los escenarios (atención a la secuencia en las Galerías Lafayette).

Así pues, creo que va siendo hora de que deje Astérix a un lado y empiece a conocer mundo…