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Aza / 2018

El pensamiento crítico

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Con motivo del Día Internacional de la Filosofía, que se celebra el tercer jueves del mes de noviembre de cada año, Literaktum junto al Departamento de Cultura de Euskal Herriko Unibertsitatea, organizaron el pasado sábado las jornadas Pentsatu!. Este festival tuvo dos partes: por la mañana, nos reunimos en la librería Kaxilda para escuchar a Danele Sarriugarte y a Fernando Broncano debatir sobre quién hace las creaciones culturales. Por la tarde, en cambio, la cita fue en Tabakalera en un formato de micro-
debates, donde por parejas (Barbara Jiménez & Iñigo Galtzakorta, Ainhoa Urien & Beñat Sarasola, Maddi Nazabal & Agustín Arrieta) se debatió sobre distintos temas actuales. Esta celebración se podría calificar como un acierto, puesto que ambas convocatorias tuvieron una gran respuesta por parte de un público muy diverso. Y, ¿cuál es el por qué de tal éxito? ¿Por qué son necesarios espacios públicos en los que se fomente el espíritu crítico?

Nuestro mundo cambia muy rápido, y lo mismo ocurre con la cultura que consumimos. Esta cultura hegemónica, como bien nos explicó Fernando Broncano, está diseñada por los que articulan nuestro mundo de una manera muy determinada: la cultura de masas no conoce la diversidad porque está hecha a imagen y semejanza de los valores mercantiles que se quieren propagar. Así, se crean puntos ciegos, para no mostrar otros tipos de cultura que pueden dañar los grandes intereses. La filosofía y el pensamiento crítico juegan en esta partida un papel vital: sólo podemos combatir la cultura hegemónica valiéndonos del espíritu crítico y creando nuestras propias formas de cultura responsable y sostenible.

Nuestro mundo cambia muy rápido por medio de las redes sociales. Estas son un arma de doble filo: por un lado, nos dan acceso a nuevas formas de conocimiento, a nuevas voces. Sin embargo, también son la mayor plataforma de la posverdad: en la red no importa el contenido, sino las emociones que genera. El atender a la veracidad de una información ha quedado en segundo plano y contribuimos así a nuestra propia ignorancia, a una ignorancia consentida. Y la única arma que tenemos para luchar contra dicha ignorancia consentida, en efecto, es el pensamiento crítico y autónomo.

El éxito del evento del sábado reside en que, lejos de esas restricciones, el público pudo interactuar de una manera abierta y libre. Dejando –al menos por un momento– las cadenas de la cultura hegemónica y el “todo vale” de la red, los ponentes junto al público debatieron sobre temas como la libertad de expresión y los delitos de odio, el dolor, la creación artística, y positivismo y pesimismo tecnológico. Estos temas fueron de gran interés para los allí presentes, ya que son problemáticas que afectan a nuestra cotidianidad. Al no haber una reflexión en las altas esferas, al menos, en un ambiente más familiar hubo la posibilidad de exponerlos y debatir sobre ellos.

En definitiva, fue un éxito porque el pensamiento crítico nos hace más libres –al menos en cuanto a las ideas se refiere–. El profesor Broncano también nos advertía esa misma mañana de la importancia de resistir en espacios donde se ejerza la autonomía de pensamiento, en lugar del dirigismo al que estamos habituados. Y las jornadas de Pentsatu! lograron plasmar muy bien una necesidad social que tenemos: que la filosofía esté en las calles y al alcance de todos y todas.

Jone Martínez Berzal

Pentsatu! & Literaktum @ Kutxa Kultur [Tabakalera]