Conversaciones con mi enano de jardín, Jean-Paul Didierlaurent
Seix Barral, 2019
250 páginas, 17,90 €, ebook 10,99 €
ISBN 978843223530-6
Con semejante título y portada, este libro se me antojaba no sé si de gran calidad, pero al menos digno de una ojeada (momento enano susurrando llévame a casa…)
Pasearse por el mundo con un enano de jardín como compañero de viaje es un puntazo: típico comercial que se gana la vida con la venta, casado, con la vida organizada y una segunda vivienda que mima con orgullo…
Comercial que, un buen día, se descubre hablando con este convidado de arcilla tan inquietante, charlando con una especie de pepito grillo que pone en jaque todos y cada uno de los aspectos de su roma, insatisfactoria y apática vida, conversando con el clarividente Número 8.
Si señores, bienvenidos al increíble mundo de los enanos de jardín, sus modas.. que Jean-Paul Didierlaurent personaliza en Xavier Barthoux y el destroyer Número 8.
Esta divertida novela -de cómo una grieta en la pared y un gnomo de arcilla cambian la vida gris de un hombre- engancha desde el primer momento y se va deslizando por un cúmulo de acciones que -”siguiendo las señales”- emprende el protagonista.
Cargando con el enano como si de un niño se tratara, iniciará un viaje exterior -se nos plantará en Nueva Zelanda- e interior -despertará sus más recónditos miedos y deseos-.
Este paseo se nos hace corto, a veces divertido, otras cargado de tristeza y malestar.
Si cuento más lo destripo, y eso como que no apetece ¿verdad?
Sólo me queda añadirlo a la lista de libros de playa o bus, de mecedora o chiringuito, de esos libros de rápida lectura pero que dejan un puntito de run-run..
Si parloteas con tu mascota, ordenador o ficus…esta es tu novela. Y a afrontar la vida con humor..
Entretenida novela del galo de los cuatro nombres: Jean Paul Didier Laurent. Una novela cuyo punto de partida es la crisis de la madurez de un hombre acomodado, pero que pese a tener una vida confortable, decide un día romper con esa rutina y adentrarse en el camino de la autorrealización.
La primera parte me pareció estupenda y engancha porque todos nos reconocemos en parte en ese sentimiento de frustración del protagonista. El Happy end es lo que no convence. Demasiado amañado. Hubiese preferido una segunda vida del protagonista menos fantasiosa. Saludos.