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El amor que te mereces, Daria Bignardi

Es una historia coral, compleja, poliédrica, contada por dos mujeres: Alma -la madre, profesora, activista de causas perdidas, absorbente y poco dada a sentimentalismos- y Antonia -la hija, escritora, independiente…y que espera su primer hijo-.
La primera recordará aquella infancia mas o menos feliz, a sus padres tan parejos como un huevo y una castaña, y la figura de su hermano Maio.

Es Maio la figura central, el fantástico y mágico hermano, el amigo increíble, el rey de la fiesta…el que iniciará un camino hacia el infierno, hacia una desaparición sin esclarecer.
La recreación de ese mundo infantil es dulce, ágil, hábil… y nos dibuja a un Maio, a su hermana Alma, a la inseparable Michela, a sus “despistados” padres, como si de una fotografía se tratara: simple pero perfecta.

Antonia es, por contra, la figura del cambio, la que intenta saber, clarificar, entender. Tal vez porque espera su primer hijo y no quiere secretos, se embarca en una aventura vital para ella: marcha a Ferrara para indagar, husmear, interrogar…como lo hace la inspectora Emma Alberici, protagonista de sus novelas de misterio. Su objetivo no es otro que averiguar qué pasó con Maio y por qué su madre nunca le habló de él ni de nadie de su familia.

Ferrara y sus gentes son otra parte central de la historia: un mundo difícil, extraño, opaco, cuyos habitantes contribuyen a hacer más sofocante el ambiente. Un obstáculo más para Antonia, que poco o nada consigue sacar de los lugareños.
Aferrada a su embarazo, tozuda y muchas veces desbordada por sus sentimientos, irá descubriendo los secretos que marcaron y marcan a los Sorani, y lo que pasó con Maio, con ese ser que era tan irresistible para los que le rodeaban.

Una lectura agradable, con ritmo, y que mantiene el interés hasta el final.
Quien busque un thriller al uso que se abstenga: hay muertos, hay rencillas, hay peleas…pero se trata básicamente de la vida de una familia redescubierta por una joven que sólo busca la verdad. Pero la verdad como tal no existe: hay tantas verdades como aquellos que las buscan, como aquellos que al final las encuentran.

Por si acaso mantengámonos lejos del baúl de la abuela. Por si acaso.

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