Instrucciones para convertirse en fascista, Michela Murgia
Seix Barral, 2019
146 páginas, 15 €, ebook 9,90 €
ISBN 9788432235023
Buf, buf, buf.
Ese es el cuerpo que se nos queda tras leer el texto de Michela Murgia.
La autora de aquella estupenda novela La acabadora, se nos planta en este ensayo incendiario con un método para llegar a ser fascista con todas las de la ley y aprovechar las virtudes del “débil y buenista” sistema democrático para causar la defunción de éste por las vías más diversas.
En un alarde de ironía, este manual desmonta los argumentos democráticos y desarrolla a la perfección el discurso autoritario.
Reivindica el fascismo como un sistema de gestión más eficaz, barato, y rápido (no hay que hacer cientos de consultas, nosotros sabemos qué hacer y cómo hacerlo..), con un jefe cuyas decisiones no son negociables y que educa al pueblo para que se reconozca en él y le siga fielmente.
Las instrucciones son precisas: utilizar las redes contando la verdad “aliñada”, repetir machaconamente la misma receta, hacer de las mentiras una media verdad…Inventarnos un Enemigo que atacar con insultos, descalificaciones y motes, desacreditándolo y culpándolo. Uno no puede dialogar con el enemigo.. hay que sitiarlo y destrozarlo.
En un mundo duro y complicado el fascismo puede protegernos de los peligros -todos tenemos algo que perder- y revertir el mundo al revés generado por la democracia -la mujer recuperará el papel de madre y base de la sociedad, los roles volverán a ser como dios manda..- y usaremos la violencia cuando sea necesario -la legítima defensa- que modo más rápido para salvaguardar nuestro sistema..
Es increíble cómo nos podemos identificar con su relato: nos vienen a la mente sucesos de ayer mismo e intentos de utilizar la libertad de expresión como bandera del discurso populista y rancio.
Hemos de agradecer a Murgia que sea el ejemplo italiano al que vuelve sus ojos para ejemplificar el ascenso de esta ideología, así podemos llevarlo a nuestro terreno con pasmosa tranquilidad.
Es una provocación esta apología del fascismo cuyo fin es claramente didáctico: retratarnos . ¿Cuánto de fascismo hay en los que se consideran antifascistas?
“El fascismo tiene la fantástica capacidad, si no estamos en guardia constantemente, de contaminarlo todo” (p.144).
“El fascismo sabe esperar. Es como un herpes(..)”(p. 12).
Una lectura imprescindible y necesaria.
Buen provecho.