13

Nov / 2018

Literatura Conectada

Autor:

Literaktum es una apuesta por la literatura conectada: con diversas disciplinas artísticas y con los debates de su tiempo. Y conectada también con el esfuerzo compartido de un programa construido en red.

En Literaktum tienen cabida todos los géneros literarios, pero también la música, la imagen, el pensamiento o la gastronomía. Es una fórmula abierta, y entiende la experiencia literaria desde esa apertura.

El retrato plural del dolor, los clásicos, la literatura que viene, la presentación de nuevas obras, debates, paseos literarios o una amplia programación infantil. Todo esto es lo que encontrará quien se acerque a Literaktum en las próximas dos semanas.

Este blog es la bitácora de Literaktum. Aquí iremos dando cuenta de lo que acontece en el festival, resumiremos (o prolongaremos) las ideas y las obras abordadas en los coloquios. Y contaremos para ello con la colaboración de dos alumnas del Grado de Filosofía de la UPV: Tatiana y Jone.

Un trabajo en equipo que muestra a las claras que Literaktum es una suma de energías. Ahora ya solo falta la tuya.

Literatura Conectada

05

Nov / 2018

Cuando la vida duele

Autor:

La literatura y el mundo viven en permanente transformación y Literaktum quiere trazar caminos en ese territorio cambiante. Y lo hace guiado por la convicción de que la literatura está siempre en diálogo: con otros lenguajes y disciplinas artísticas y con los debates de su tiempo.

El tema central de Literaktum 18 es un rasgo esencial de la condición humana que está muy presente en la cultura y la experiencia contemporáneas: el dolor. De la pérdida al conflicto social, de la soledad a la violencia, constataremos la capacidad de la literatura para dar forma a las experiencias dolorosas. Pero al mismo tiempo comprobaremos también su poder catártico y liberador al narrarnos esas experiencias. La literatura dibuja nuestro laberinto, pero es también el hilo que nos orienta en él.

Otro de los ejes de esta edición será la literatura que viene, la escrita por autoras y autores menores de 30 años. Una mesa redonda reunirá a algunas de las voces más interesantes de la nueva literatura en euskera. Y para completar esta perspectiva, otro coloquio analizará la manera en que los y las jóvenes se acercan a la lectura.

En la sección Literaktum presenta tendremos la oportunidad de hablar en primicia con tres de los autores vascos más importantes acerca de sus recién publicados libros: Harkaitz Cano, Katixa Agirre e Iban Zaldua presentarán sus nuevas obras al público de Literaktum.

Un festival es una cierta foto del presente, pero en ese ahora siempre hay sitio para los clásicos. Porque, ¿qué otra cosa es un clásico sino un contemporáneo permanente? Literaktum 18 se acercará a Anna Karenina con una cena literaria; a Baroja con un paseo dramatizado; a García Lorca a través de una adaptación teatral de sus Sonetos del amor oscuro, y a Roberto Bolaño por medio de una viaje literario y visual por los desiertos de Sonora.

La literatura también será la puerta de entrada a algunos de los debates más importantes de la sociedad contemporánea: las nuevas amenazas para la libertad creativa, la escritura como forma de resistencia al poder o los procesos por los que se generan los discursos culturales dominantes.

Cine, música, exposiciones y creación sonora, sin olvidar el programa de actividades infantiles Literaktum Txikia, completan una propuesta diseñada en colaboración con una amplia red de instituciones y agentes culturales unidos por un objetivo común: una fiesta de la literatura que se despliega por toda la ciudad y en la que todos y todas pueden encontrar su libro, su autor o su actividad.

Literaktum 2018

24

Nov / 2017

Ni recetas mágicas, ni novelas perfectas

Autor:

Sus trayectorias literarias no tienen demasiado en común, a pesar de haber alcanzado el éxito en cuanto a premios y lectores. De generaciones diferentes, los escritores David Foenkinos y John Banville han ofrecido sus visiones respecto a la novela en la recta final del festival Literaktum, mostrando humor e ironía en sus charlas.

Ni existe una receta mágica para conseguir que tu novela se convierta en best-seller ni existe la novela perfecta. Lo dejaron claro ambos escritores. Mientras tanto, siguen escribiendo, intentando ser originales, y deleitando a lectores y lectoras de todo el mundo.

Conseguir que tu novela sea exitosa es algo imprevisible según afirmó Foenkinos, ya que él mismo escribió varios manuscritos antes de alcanzar el éxito con La delicadeza. Recordó el ejemplo conocido de John Kennedy Toole, cuya gran novela La conjura de los necios fue rechazada una y otra vez por editoriales y consiguió el éxito a los años, tras haberse suicidado el autor. Por ello, intenta ser original y no utilizar siempre las mismas estructuras. “Mi relación con la literatura es humana, no mecánica”, subrayó; “no me interesa repetir ideas, sino explorar nuevas vías”. Así, consideró que su literatura es extremadamente viva y todos sus libros llevan una parte de sí mismo.

Vivo, positivo, feliz. Intenta transmitir su positivismo y felicidad en el día a día, tanto escribiendo como en su vida cotidiana con su familia. Se considera un trabajador incansable y escribe haya donde esté. Rompe así la clásica imagen del escritor que necesita concentración en un espacio, frente al ordenador, afirmando que adora escribir mientras viaja en tren.

Menos contenido que Foenkinos, John Banville demostró desde el minuto uno que no se arredra ante ningún tema o pregunta, y opinó de temas tan diversos como la iglesia católica, el brexit o los traumas de la infancia, con ingenio y humor. Como escritor, a sus 71 años, considera que sigue practicando con la escritura, ya que es imposible conseguir ni la perfección ni la novela perfecta.

El desdoblamiento con respecto a Benjamin Black, el seudónimo utilizado para publicar su novela negra, es un tema recurrente en sus charlas y entrevistas. El escritor irlandés afirmó que adora la simetría y considera que las personas tenemos múltiples personalidades y nos reinventamos continuamente. Llamó la atención la manera de dirigirse a sí mismo, a John Banville y Benjamin Black a la vez, como escritores que nada tienen que ver con él, como si no fueran creación suya. “Admiro la falta de pretenciosidad de Benjamin Black, pero a Banville no le interesa para nada. Él quiere hacer poesía”. Disfruta con esas dos vertientes de su escritura, esas mano izquierda y derecha, que le permiten optar por diferentes estructuras y estilos de escribir.

La prosa más ligera que muestra en sus novelas negras no esconden el poeta que lleva dentro. Considera la vida como un “absoluto misterio” del cual no llega a acostumbrarse. La lluvia que cae, las nubes esponjosas que se mueven de aquí para allí, los colores del otoño irlandés… son pequeños placeres de los que disfruta día a día.

Dos escritores que disfrutan de su trabajo. De su escritura. “La literatura cambia la vida de las personas”, afirma Foenkinos. “Si todas las novelas fueran artísticas, la novela se habría muerto”, palabras de Banville. Un placer.

David Foenkinos & John Banville

23

Nov / 2017

Gu geu

Autor:

Beldurgarriak dira; hain dira karratuak, mugatuak, finituak gure alboan. Ez dute ahots propiorik, eta ahots ez-propio hori hain da arrotza eta hotza. Ez dute erabakitzeko ahalmenik, eta hartutako bidea ja hain dago determinatuta aurretik. Gure espazioak lapurtzen dizkigute gure gorputzak irentsiz, haiek ere gorputzak bailiran; gure ideiak kentzen dizkigute, guk geuk programatzen ditugun unetik; gure lanaz –eta, beraz, denboraz– jabetzen dira, gure zereginak eskuratuz. Ez dute euren gaineko kontrolik, zorretan daude, hortaz. Eta, gainera, ez dute inolako konfiantzarik transmititzen, ezta euren artean ere, beren artean ere ez baita elkarrizketarik ematen. Ez dituzte barre algarak partekatzen, ez sentimendurik azaleratzen, ez emoziorik erakusten. Orain arte ez diot inori malko bat bera ere isurtzen ikusi. Eta errepikakorrak dira, oso errepikakorrak. Beti joan-etorri berdinak, beti mugimendu homogeneoak. Uzkurtuak dituzte gorputzak, ez baitute inoiz dantzatu.

Horrelako diskurtsoren bat espero nuen atzo Zigor Etxebesteri Belén Gopeguik emandako erantzunetan, baina ez zen hala izan. Gopeguik distopiaren eta utopiaren arteko desberdintasuna ez dela hain handia azpimarratu zuen; ez dagoela amildegirik, amildegiak salto handia eskatzen baitu batetik bestera. Ez zuen, beraz, robotekiko jarrera negatiborik erakutsi, ez ditu beldurgarri sentitzen. Beldur handiagoa ematen diogu guk geuk, gizakiok. Belénen ustez, kontua ez da robotak bai ala ez, robotak zertarako baizik. Erabilera da garrantzitsua, ezartzen zaien norabidea. Zientziaz jabetu behar garela dio, robotak erabiltzearen zergaitiaz hausnartu behar dugula, adimen artifiziala erabiltzearen helburuez pentsatu behar dugula, egon jada, egon baitaude. Hori bai, Belén hausnarketaz ari denean, ez da entrepeneur edo enpresario baten ikuspegitik egindako “hausnarketaz” ari, besteaz baizik.

Belén Gopeguiren Quédate este día y esta noche conmigo azken nobelak ez du soilik gai hori lantzen. Esaterako, kontenplazioa agertzen den beste gai bat da. Olgak, nobelako protagonista batek, tostadora kontenplatzea gustuko du. Denbora aurrera doan bitartean, maite du tostadak nola belzten diren ikustea. Maite du, besterik gabe, itxarotea. Badaki, soilik, itxaroten. Belének ez du Olga beste zereginen bat egiten jarri tostadorak lan egiten duen bitartean. Olga ez da joaten ezpainak gorriz margotzera tostadak belzten doazen bitartean. Ez du aprobetxatzen tostadoraren lan tarte hori beste zerbait egin ahal izateko. Geldirik, soilik, tostadorari begiratzen dio, bertan kontzentratuz, erlojuaren orratzak entzuten dituen bitartean. Belenek nahita erabiltzen du adibide hori, kotidianoa, xumea eta modestoa den aldetik. Eta ez da mindfulness gisako kontenplazioaz ari, besteaz baizik.

Belén Gopeguik, beste behin ere, lortu du gatazketan kiribiltzea eta haiek beste
ikuspegi batetik begiratzea. Dio: “Momentu honetan ez gara gu geu robot?”.

Zigor Etxebeste & Belén Gopegui

22

Nov / 2017

Ispiluak eta basamortua

Autor:

Bi ikuskizun bereizi izan ditugu Literaktumen, agian ohikoa bezain masiboak ez direnak, literaturaren ertzetara joaten direnak eta beste diziplinekin talka egiteari beldurrik ez ziotenak.

Nigan, ispilu baten bezala, izan zen lehena, Petti eta Irati Jimenezek joan zen larunbatean Lugaritz kultur etxean eskaini zutena. Errezitaldi musikatua ala musika errezitatua, berdin dio, zeren hitzen eta doinuen jolasa betierekoa baita, hitzak kantura erraz egin izan dutelako salto, eta kantua, musika delako, eta musika instrumentuekin hornitzen delako, zapata oinari egokitzen zaion bezalaxe, denak norabide berean lan egiten dutelako, joan-etorriko ispilu joko batean.

Ispiluak, metafora gisa, kristal gardenenak ere lortzen ez duen hori lortzen du: geure buruaren isla ikustea besteengan, geure buruarekin elkarrizketa ahalbidetzea, geure barruan ere besteak ikustea eta haien tokian jartzeko aukera ematea. Ez dago gizakirik bestea gabe; ez dago bizitza bestearekin bakarrik, gizakiak gizaki izateko bestea behar duelako, bestearen isla behar duelako, adibidez, begirada batean, gizaki izaten jarraitu ahal izateko. Ispiluak elkarrizketak dira, besteak ezagutzeko, baina batez ere, besteengan geure burua ezagutzeko. Charles Horton Cooley looking glass self kontzeptu zientifikoaz harago, Petti eta Iratik azaroko gaur hotz horretan ispilu literario eta musikatu zoragarriak oparitu zizkiguten.

Baina, ispilurik ezean, fisikotasun hutsa baino ez dago, haragia, haragi hotza, arimarik gabeko nia. Ispilurik ez badago, bihotzaren leihoetatik basamortua sartzen da, hitzaren zentzu osoan, basati, gordin, mortu, eta hil. Horregatik, Isturitzetik Etiopian barrena ikuskizuna ispiluen kontrapuntu bikaina izan zen. Beñat Goitiak eta Adrian Puck Djak ispilua hautsi zuten, edertasunez hautsi zuten heriotz hotz zorrotz arrotz batean. Gizakia bakarrik geratu zen, berorik gabe, bestearen faltan, entzuna eta ikusia ez zen eremu mortu batean. Edo hobeto esanda, gizakia islarik gabe geratu zen, itaundu ere ezin zuen itzalik gabe, argiz betetako gau zintzilikatu batean. “Amaren bularrak ebaki zituen kutxilloaren ertzak erdibitu egiten du semearen bihotza ere” bota ziguten halako batean eta denok sentitu genuen metalezko aizto errukigabearen hotzikara gure bularreko haragi xamurrak irekitzean izotzezko basamortu bakarti eta krudel horretan. Izatez, Etiopiako basarmortuak ez baitira normalean irudikatzen ditugun bezalakoak; basamortu zuriak eta hotzak dira, ispilu-argiaren berotasunez barrenak goxatu ezean, zainetatik labana bezain hotz sartzen direnak.

Beñatek berak esan zigun kandelak piztea puzte baino hobegoa zela. Baina piztu ezean, puztu, peztu, eta azkenean, azkenean PUM!

Isturitzetik Etiopian barrena [Beñat Goitia & Adrián Puck DJ]

21

Nov / 2017

Animales domesticados

Autor:

En las cocinas de toda gran ciudad se esconde un deseo palpitante de abandonar la frenética rutina y escapar al silencio del campo. Dentro de cada uno de nosotros se encuentra una eterna lucha entre la naturaleza (quienes realmente somos) y la cultura (quienes hemos acordado ser para posibilitar una convivencia). Muchos hemos deseado dejar atrás las ciudades y más concretamente el mundo feroz del capitalismo, para buscar una identidad que de cierto sentido a nuestra existencia. Un lugar en el que podamos reconocernos a nosotros mismos tal cual somos, sin distracciones externas.

El libro Walden, de Henry David Thoreau, dio forma a un movimiento emancipatorio que relata precisamente el deseo profundo de dar la espalda a la civilización industrializada y aferrarnos a la naturaleza como salvación de nuestro lado más humano. Algo así como volver a nuestros orígenes para encontrar la esencia que nos hace ser humanos.

Influidos por este movimiento, que toma el nombre de neorruralismo, se encuentran Iván Repila y Sergio del Molino. Dos escritores contemporáneos que hacen uso de la metáfora del campo como utopía para desarrollar sus relatos y que no dudaron en debatir lo que piensan al respecto.

Nada más comenzar la charla, Sergio del Molino dejó claro que lo esencial nunca fue apartarse por completo de la civilización, sino alejarse del mismo para tomar conciencia y percibirlo de otro modo. Lo rural da al ser humano el espacio necesario para conectarse con sus instintos más primarios. No tiene obligaciones apremiantes, ni expectativas, tampoco reglas de convivencia acordadas previamente. Tan solo una hoja en blanco en el que uno tiene la libertad de explorar su identidad sin las limitaciones que implica vivir en una ciudad cosmopolita. Es decir, no consiste en volver a lo rural, sino volver a uno mismo.

Tal como defendió Ivan Repila, un espacio simbólico así nos permite aproximarnos a simplemente “ser”, en vez de al “debería ser”. Esto resulta sumamente interesante, porque supone que sólo nos permitimos ser nosotros mismos cuando nadie nos está mirando.

Además, con esta forma de experimentar el mundo resulta más sencillo poner en perspectiva muchos comportamientos sociales que a menudo nos son inculcados por ser mera tradición en vez de por el sentido común que puedan tener los mismos.

La soledad y la quietud que puede ofrecernos el campo, en oposición con la velocidad frenética de las grandes ciudades, nos permite reconocer nuestro comportamiento sin el bombardeo constante de las ideas de otros. El distanciamiento con una sociedad capitalista nos hace cuestionarnos hasta qué punto es necesario reprimir nuestras necesidades y deseos más profundos por el bien de la convivencia con los otros y si realmente merece la pena el esfuerzo de hacerlo. En cierto modo, no somos más que
animales domesticados.

Así, los libros de estos escritores, aunque tengan tonos muy distintos, comparten cierto regusto político, con toques de desobediencia civil tan necesarios en sociedades en las que cada vez se cuestiona menos aquello que debería ser o no adecuado. Un debate con una perspectiva única que posibilita hacer suposiciones de lo que podría ser el futuro mirando al pasado.

Walden [Henry David Thoreau / 1854]

20

Nov / 2017

Filosofia kalean

Autor:

Ez zirudien oso leku aproposa hasiera batean. Jakin bagenekien espazioek gure gorputzak baldintzatzen dituztela. Nola sortzen diren espazio hotzak, epelak edo beroak –edota horien tarteko graduren bat–; nola bultzatzen gaituzten espazio batzuek ausartago izatera, edo nola kakaztu dezaketen espazio batzuek beste batzuek emandako aurrerapausoak. Baina arriskatu, arriskatu ginen, eta nago, positiboki ebalua daitekeela atzokoa.

Taba tabernan eta, gainera, larunbata izaki, ez dut uste elkarrizketa filosofiko
asko ematen direnik. Ez gaituzte horretarako hezi. Ordea, atzoko arratsaldea desberdina izan zen, filosofiak blaitu baitzuen giroa eta espazioa. Pentsatu! Jaialdiak filosofia kalera ateratzeko asmotan, Taban hiru elkarrizketa filosofiko antolatu zituen, sei hizlariren eskutik. Goizean ere Kaxilda liburutegian Ixiar Rozasen eta Santiago Alba Ricoren arteko elkarrizketa egon zen: Sobre la voz y el cuerpo. Eta ez hori bakarrik, ostiralean Filosofiako Fakultatean bertan hainbat jarduera egin baitziren helburu berarekin. Bi egun izan badira ere, lortu genuen filosofia ikasgelatik kanpo ateratzea. Eta zeinen zaila den hori, zeinen urrun gauden filosofiatik.

Badirudi filosofia Platónen Haitzuloaren Mitoarekin hasi eta bukatzen dela.
Filosofian irakasten diguten lehenengo gaia da gehienetan, eta erakusten den
moduagatik zerbait “arraroa” dela iruditzen zaigunez, ja filosofia osoa ideien
munduekin edo “arraroa” den horrekin erlazionatzen dugu, zoritxarrez. Baina filosofia, zorionez, ez du Platónek bakarrik okupatzen, eta interesgarria (eta beharrezkoa) izan daiteke, oso.

Atzo arratsaldeko lehenengo elkarrizketan, esaterako, “Normaltasun” kontzeptuaz jardun zuten Melania Moscoso eta Alba Amilburu irakasleek. Zer da “normala” izatea? Zerk eramaten gaitu “normala” izatera? Zeintzuk dira “ez- normalak”? Desberdindu egin behar dira “normaltasuna” eta “naturaltasuna”? Zein erlazio daukate? Gisa horretako galderei erantzun zieten, batak besteari tiraka, usteak azaleratuz.

Belen Altunak eta Mikel Torresek animalien eskubideen inguruan eztabaidatu
zuten. Mikelek, begano baten ikuspegitik, animaliek eskubideak dituztela edo
sufrimenduetatik aske bizitzeko eskubidea eduki behar dutela defendatu zuen, izaki kontzienteak direla azpimarratuz. Eta ekologisten aurka, animaliei aske egiteko naturanesku hartu behar dugula adierazi zuen. Belenek, aldiz, barazki-jaleen aurka jo zuen eskubideen esparrua animaliena ez dela azpimarratuz, izan ere, bere ustez eskubideak betebeharrekin elkarlotuta daude eta animaliek ezin dituzte betebeharrik eduki.

Azken solasaldia Maddi Nazabalen eta Agustin Arrietaren artekoa izan zen.
Umoreaz eta umorearen mugaz aritu ziren, egun puri-purian dagoen gaia. Kasu honetan, ez ziren oposiziozko bi ikuspegi egon, aitzitik, batak bestea indartu zuen. Nola den umorea barrea eragiten duen entretenimendu komikoa; nola umorearen bitartez gizarteko arauak edo patroiak ezbaian jartzen diren eta talka bat ematen den; nola umorea ere politikoa den; nola umorea botere-harremanen adierazle den. Hori guztia eta beste zenbait kasu edo adibide landu zituzten Maddik eta Agustinek. Benetan interesgarria.

Hurbildu zen jendeak, zorionez, parte hartu zuen; jendeak bazuen zer esan, eta hori beti poztekoa da. Ea horrelako topaketa gehiago egoten diren, ea filosofia kalera, herrira ateratzea lortzen dugun.

El pensador (François Auguste René Rodin / 1879-1889)

20

Nov / 2017

Utopías

Autor:

No es frecuente en la historia de la literatura que una sola obra funde un género. Los géneros son casi siempre la concreción paulatina de una suma de trabajos previos. Otro tanto sucede en la historia de las ideas, en la que los conceptos se van decantando por medio de sucesivas aportaciones, hasta cristalizar en un perfil reconocible (aunque, por supuesto, hay que recordar que todo género y todo concepto siguen mutando en el tiempo). Pero cuando el humanista inglés Tomás Moro publicó Utopía en 1516, además de una crear obra extraordinaria, también alcanzó ese doble logro: echó a rodar un género y propuso un concepto que desde entonces han sido claves para entender la cultura occidental y que siguen influyendo fuertemente aún hoy.

Quizá esa pervivencia de la utopía se explique porque sirve para canalizar una preocupación esencial del ser humano: la de darle forma al futuro, la de concretar los perfiles infinitos de lo posible. Porque aunque utopía quiere decir no-lugar, en realidad es sobre todo una reflexión sobre el futuro. Tiene que ver con el tiempo, no con el espacio. Una utopía es una propuesta sobre cómo podríamos organizar el mundo. O más concretamente, sobre cómo podríamos organizar un mundo mejor. Por eso la utopía alberga siempre un potencial revolucionario. Es una enmienda a la totalidad, un deseo de radical transformación. Pero por eso también puede acabar siendo un ensueño totalitario. Solo que entonces lo llamamos distopía. Basta recordar 1984, de Orwell.

De alguna manera, la distopía es la evolución natural de la utopía, dado nuestro desengaño revolucionario, nuestra quiebra de la confianza en fundar un mundo mejor. Hoy el futuro nos inquieta. Nos asusta. Ya no nos enfrentamos a él desde la convicción del progreso y de la perfectibilidad, sino más bien desde el azar y la incertidumbre. Tenemos la sensación de haber perdido el control, y de que el desarrollo de nuestras invenciones puede llevarnos a nuevas formas de caos o totalitarismo o alienación, mucho antes que a un futuro más libre y más justo. Por eso la distopía es uno de los géneros más presentes hoy. Sobre todo en su versión tecnológica (Blade Runner, Black Mirror…), pero también social (The Handmaid’s Tale, V de Vendetta…), aunque ambas se entrecruzan y fusionan, claro está (pensemos por ejemplo en Her).

Pero la utopía siempre aguarda a ser reinventada, porque según las conocidas palabras de Oscar Wilde, “un mapa del mundo que no incluya la utopía no merece ser mirado”. En Literaktum 17 hemos querido asomarnos al pasado, presente y futuro de la utopía, o mejor dicho, de las utopías, con tres actividades. Diez días que sacudieron el mundo es el clásico de John Reed sobre la Revolución bolchevique, que ha sido reeditado por Nórdica Libros y Capitán Swing, con ilustraciones de Fernando Vicente. El editor de Nórdica, Diego Moreno, el crítico literario Iñaki Urdanibia y el citado ilustrador mantuvieron un coloquio en la librería Zubieta el pasado 17 de noviembre.

El lunes 20 de noviembre los escritores Sergio del Molino e Iván Repila conversarán acerca del legado de Walden, la obra en la que Thoreau plasmó una utopía naturalista que no ha dejado de influir desde entonces. Tanto Del Molino como Repila cuentan con obras que se inscriben en la corriente denominada neorruralismo, en la que el eco de Thoreau es patente.

Y no podía faltar en este ciclo de “Utopías” una reflexión sobre un futuro que ya es presente: el impacto de la tecnología en las relaciones sociales y personales. Será la escritora Belén Gopegui, a partir de su última novela, Quédate este día y esta noche conmigo, quien nos hable de ello en coloquio con Zigor Etxebeste el próximo 22 de noviembre. Tras la conversación tendremos la oportunidad de ver una de las más famosas distopías de la historia del cine: el clásico de Fritz Lang Metrópolis, gracias a una colaboración entre Literaktum 17 y el ciclo Nosferatu organizado por Donostia Kultura y Filmoteca Vasca.

Utopia [Thomas More]

16

Nov / 2017

La aventura de seguir escribiendo

Autor:

Sobre las siete y media de la tarde de ayer, Rosa Montero abría la puerta de una sala abarrotada de lectores y lectoras que esperaban impacientes las palabras en vivo de una escritora que acaba de ser galardonada con el Premio Nacional de las Letras. Escribe con Rosa Montero es el título del último libro de la escritora, en el que aconseja y enseña a escritores primerizos a desarrollar este arte en el que se basa toda su trayectoria profesional.

La entrevista, hecha por Pilar Rodríguez, comenzó con fuerza, destacando sobre todo la temática de su último libro; el proceso de escritura.

Tiene sentido pensar que cuando uno enseña algo, como Rosa Montero trata de hacer en este último libro, lo hace basándose en aquello que ya ha aprendido. Sin embargo, fue una grata sorpresa descubrir que, en contra de lo que cualquier lector o lectora pudiera imaginar encontrarse, dejase claro desde un principio que el proceso de enseñanza es, a su vez, el mayor proceso de aprendizaje que uno puede experimentar. Sobre todo en lo que se refiere al aprendizaje sobre uno mismo. Afirmó que ella misma se sorprendía en ocasiones por sus propias palabras, y destacó, sorprendentemente, el peso que tiene el subconsciente a la hora de emplear las mismas. Por eso, para ella, aconsejar sobre escritura ha sido como aprender de nuevo sobre ella misma.

Entre pequeñas anécdotas y alguna que otra risa, la escritora confesó que el acto de escribir nace de una necesidad compulsiva de compartir sus pensamientos con otros. Nada que ver con la idea de pensadores racionales y ordenados que asociamos con los escritores a menudo, sino más bien de una pulsión que nace de un germen casi instintivo de comunicarnos.

Resulta llamativo que defendiese que la mejor forma de compartir es permitir que la historia se vaya desarrollando de la mano de los propios personajes que uno va creando. Es decir, dejar que nuestros personajes vayan esbozando su propia personalidad con libertad, no poner límites a nuestra creatividad,conocerlos, reescribirlos y evitar ceñirlos a la idea sopesada y calculada que tenemos de los mismos.

Debemos intentar abandonar la creencia de que escribir es un proceso completamente lógico y ordenado, y aceptar que siempre cabrá en el mismo un poco de caos inicial que luego vaya tomando forma (como la personalidad que van construyendo los propios personajes). Para decirlo de otra forma, en ocasiones nos emocionamos al imaginar situaciones que podrían experimentar nuestros personajes y desconocemos el por qué. Según Rosa Montero, resulta indispensable para cualquier escritor perseguir esa emoción, por mucho que parezca algo irracional en un principio y seguir escribiendo. Después, al leerlo y tomar distancia, iremos destapando las razones que nos han conducido a escribirlo.

Se trata de una idea reveladora, ya que, esto último nos permitiría liberar los fantasmas de nuestro subconsciente sin tenerles miedo, de manera libre y ordenada, por mucho que algo irracional parezca, en un principio, algo que no puede ser entendido ni controlado. Lo curioso es que así, sobre un papel y con un poco de tinta, al tratar de dar vida propia a nuestros personajes, terminamos relatando nuestro propio cuento. Al hablar de los otros decimos más de nosotros mismos que de ellos.

Además, para reforzar este argumento, dio gran importancia a la necesidad de los escritores de no estancarse en un mismo género. Se trata de contar lo mismo (nuestras obsesiones y preocupaciones) pero hacerlo de diferente manera. Solo así podemos ir descubriendo elementos de nosotros que desconocemos.

Tomando como referencia lo último, voy a citar mi frase preferida de la entrevista: “No hay nada más triste que un escritor que copia sus propias obras”. Escribir debe ser la aventura de seguir aprendiendo, el reflejo de nuestro crecimiento.

Escribir es contar a través de las vidas de otros nuestro propio relato.

Pilar Rodríguez & Rosa Montero

15

Nov / 2017

Urrunekoa hurbil

Autor:

Ekialde Hurbila deritzon lurralde-eremua urrun geratzen zaigu, ezbairik gabe. Kilometro kopuruan ez ezik, urrun sentitzen ditugu bertako arazo eta egoera soziopolitiko, geografiko eta kulturalak. Hedabideen eskutik jakiten dugu Iranen hauteskundeak direla, Irak bonbardatu dutela Amerikako Estatu Batuek edota Siriako herritarren egoera latza. Jasotzen duguna gertatzen denaren lagin txiki bat besterik ez da, ordea. Titular handiak betetzen dituzten albisteen atzetik, etxebizitza suntsituta, seme-alabei jatekoa emateko ezintasuna duen familia dago; dena utzi, soinean eraman ditzaketen puskak bildu eta ihes amaiezinari ekiten dioten errefuxiatuak daude; aitorpenik eta ahotsik ez duten herrien erresistentzia dago.

Aurpegi horiek eta beste hamaika egunero erakusten saiatzen dira profesionaltasun handia erakutsi duten hiru euskal kazetari: Mikel Ayestaran, Ane Irazabal eta Karlos Zurutuza. Gatazka eta herrialde horien egunerokoan murgilduta, urrunetik begiratzen diogun errealitate horren beste ikuspegi hurbilago bat eskaintzen dute. “Iraultza arabiarrak” izenez ezagun egin zen fenomenoa abiapuntutzat hartuta, elkarren esperientziak bildu eta Ekialde Hurbila, muinak eta ertzak liburua josi dute Berria, Jakin eta Elkarren bidez. Herrialde horien iragana, oraina eta etorkizuna aztertuko dituzte gaur San Telmo museoan, 19:30etik aurrera, eta Jaime Otamendi gidari dutela.

Aurpegi ezaguna da, telebistan bereziki, Mikel Ayestaranena. Motxila hartu eta kazetari freelance izatea erabaki zuenetik, gerra ugari ezagututakoa da. Siriako eta Irakeko gerrei erreparatuko die gaurkoan. Ane Irazabalek Erroman du bizitokia egun, baina arreta handiz jarraitzen ditu Tunisiako eta Egiptoko iraultzen ondorenak. Bertatik bertara ezagutzeko aukera izan zuen eta horiek izango ditu hizpide. Karlos Zurutuzak gatazkak eta giza eskubideak gaiak jorratzen ditu bere kazetari-lanetan, eta oraingoan, Ekialde Hurbileko ertz geografikoetara bidaia egingo du, munduan aitorpenik ez duten herrietan begirada pausatuz eta isilarazitako herriei hitza emanez.

Lurralde-eremu zabal bat, urruna. Hiru kazetari, hiru ikuspegi, hurbilekoak. Urrunekoa hurbilago bilakatzeko ahalegina. Erabateko gaurkotasuna duen gai bati buruz apur bat gehiago ezagutzeko aukera.

Ekialde Hurbila, muinak eta ertzak [2017]